jueves, 11 de febrero de 2010

EL JUEZ EUGENIO ZAFFARONI

El juez Eugenio Zaffaroni aporta nuevos emprendimientos productivos
Es que la "mentada jueza" -que le dicen- de la Suprema Corte de Justicia ha declarado:
"Nadie puede ordenar un allanamiento por un porro o por una planta de Marijuana".
Y agregó la locarda: "El tráfico de marijuana no genera grandes mafias, es un tráfico "folclórico".

Por ello se creará en el ámbito Oficial la "Unidad de Proyectos Productivos"; que ya ha generado algunos exitosos casos, como se ve en la foto que sigue...
Los alcances de la Ley de despenalización de drogas no es exclusivamente para la"yerba", sino para toda sustancia que sa eso: droga; de lo contrario sería la "Ley de Despenalizaión de la Marijuana".
Más claro: Despenalizar todas las drogas; que se producirán -ya se producen a escala nacional, y algunas se importan- y que venderán masivamente al mayor estilo "Combo" o a libre elección.
Se inaugurarán para tales "Emprendimientos Productivos" laboratorios de una forma muy simple:
Todos los que eran ilegítimos pasarán a la órbita Oficial, de tal manera que los mismos generen ingresos legítimos, por ejemplo tributando IVA y Ganancias para que la Administración de Ingresos Públicos (AFIP) recaude grandes sumas para tener dinero "fresco" para futuras campañas electorales.
Laboratorios que serán la delicia d chicos y grandes.
En fin; que la "Parca" -la muerte-, tendrá clientes a patadas para llevárse vidas a su madriguera: La "Parca" de la mafia, se entiende.
Consejo:

Ya sabemos que la droga mata, no hay tu tía.
Las drogas, sean "blandas", sean "duras" matan.
Ya no existen lugares de reabilitación, habida cuenta que el Gobierno les ha retirado -es más que obvio- las ayudas para que subsistan.
Queda la pelota tirada al campo de los padres.
Será la Familia quien deba salvar a sus hijos.
Todo esto es exclusiva consecuencia de la democracia; que desde que existe no ha traído más que su accionar delictivo en todos los órdenes, y la consecuente pérdida de valores morales y espirituales.

Y colorín colorado esta historia ha comenzado.

Esteban Falcionelli

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