jueves, 5 de noviembre de 2009

SEÑORA, NO DIGA PAVADAS

CONTRA LA REFORMA POLITICA A LA URUGUAYA
Hace pocos días la Nación tuvo que escuchar a Cristina Fernández de Kirchner elogiando el sistema electoral uruguayo.

Como oriundo de la Provincia Oriental le digo: SEÑORA, NO DIGA PAVADAS.

El sistema electoral uruguayo es el peor del mundo.
Sí, así como lo oye (o como lo lee), y con mayúscula: el PEOR del mundo.

Ya en otras ocasiones desde Uruguay le hemos contagiado a otras provincias aberraciones como la ley de lemas, u otras costumbres o ideas perversas similares.

Téngalo claro: usted habla porque no sabe nada, o habla tal vez porque sabe demasiado y se propone por ello calcar el modelo demencial electoral uruguayo para que le sirva a sus intereses y así imponérselo a la Nación, para que usted y su marido hagan negocios oprimiendo al pueblo saquéandolo, cosa que ustedes sí han sabido hacer.
Usted sabrá cuál de las dos opciones es la real.

Pero sea cual sea esa realidad, señora, el pueblo de la Nación debe saber con claridad qué clase de pergeño electoral está tratando usted de promover y/o de imponer.

El sistema uruguayo es el único sistema en el mundo en donde no solamente se obliga al elector a votar cargos totalmente disímiles en forma conjunta en una sola papeleta no recortable, sino que además en él el elector jamás sabe a ciencia cierta a quién en definitiva está votando.
Como dice nuestra sabiduría popular, "Nuestro voto secreto es tan secreto que ni siquiera podemos saber a quiénes estamos votando".

El sistema de la ley de lemas más los sublemas más el tercer escrutinio, hacen un pastiche impotable con el cual se viene manipulando al elector uruguayo desde principios del siglo XX.

Es un sistema científicamente perverso y opresor: no se sabe por quién se vota, se vota en un departamento y el voto va a parar a otro departamento a 600 km de distancia en donde el votante no conoce el candidato ni sabe que existe; y no se puede tampoco cortar boleta por ningún lado, y hemos así inventado el record mundial denominado "lista súper-sábana".

Hace años que a nivel de la nación Argentina y en las provincias se viene proponiendo la eliminación de las listas "sábana".
Pero en Uruguay es muchísimo peor, peor hasta el disparate: en Uruguay se vota todo en listas "súper-sábana".

La lista "sábana" es discutible, porque en definitva la arma un partido político que está en todo su derecho de hacerlo si lo hace estatutariamente y jurídicamente.
Sin embargo se critica la imposibilidad de que la gente no pueda votar en la elección por ejemplo al segundo de la lista sin tener que votar al mismo tiempo al primero si el primero no le gusta.

Pero en la lista súper-sábana" uruguaya no solamente rige todo esto: además de ello tampoco se puede cortar boleta, y hemos así llegado al record mundial de que se vota en una sola papeleta no seccionable ni recortable el presidente, el vicepresidente, los senadores, los diputados y hasta los miembros de las juntas electorales, todos cargos que nada tienen que ver entre sí.
Pero además y sin embargo las nóminas que están juntas en una misma lista que no se puede cortar -lista “súper-sábana”- tienen en cada nómina un sistema distinto de acumulación con otras nóminas conocidas o desconocidas de otras listas por lema, y en el caso del senado además también por sublema; y a todo ello se le suma el tercer escrutinio, que vuelve completamente indescifrable a cualquier ciudadano saber realmente por quién votó en definitiva, haciendo así que la democracia se transforme en una lotería.

Insisto, señora, sólo en Uruguay se puede lograr semejante cosa tan monstruosa, sin parangón en el mundo: tan monstruosa que me juego a que muchos de los que leen esta nota no entienden nada de lo que dije ni de cómo es nuestro sistema electoral uruguayo...
Es que "el sistema" es lisa y llanamente incomprensible; y aberrante.

Y a todo esto que venimos soportando desde hace casi un siglo, en 1996 Julio María Sanguinetti con su engendro pseudo-constitucional le agregó una nueva aberración, a la que usted hace precisamente mención en su discurso de listas coloridas en mano: las elecciones mal llamadas "internas abiertas".

Los partidos políticos, señora, son personas jurídicas, no sé si usted sabe: los partidos políticos son creados por un conjunto de personas con una común doctrina y/o idea, que se asocian entre sí para implementarla mediante el logro del voto popular y mediante el posterior gobierno así obtenido en lo legislativo y/o en lo ejecutivo, ya sea a nivel nacional, provincial y/o local.
Por lo tanto los partidos políticos pertenecen a su afiliados o adherentes, y es más, los partidos políticos son sus afliliados o adherentes.

Los partidos políticos son en ese sentido un simple grupo de personas asociadas con un fin común: igual que un club de fútbol, o una mutualista, o una asociación civil.

A nadie se le ocurre que en las elecciones de river plate voten los afiliados o los meros hinchas de boca juniors, porque es un club ajeno: sería absurdo, y además destruiría al club.

Pero en uruguay batimos el record: cualquiera vota en cualquier lado, y así hoy usted con otras personas crea un partido político y después tiene que ir a unas disparatadas "elecciones internas abiertas" en donde los miembros del partido pierden el control del mismo a manos de ajenos... y de contrarios.

¿Ese es el disparate que usted quiere construir?
¿Quiere usted acabar del todo con la democracia destruyendo el sistema político como lo hizo Sanguinetti en uruguay en 1986??

Pueblo argentino alerta: no se debe estropear un sistema electoral ya en parte estropeado por la reforma menemista de 1994, sino mejorarlo.
Señora de kirchner, créame: no se debe hablar de lo que no se sabe… por ello le recomiendo: no diga pavadas, pero sobre todo, por el bien de la nación, no las haga.

Y esperamos que a su vez la oposición no caiga en este tipo de trampas y de cuentos chinos frívolos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario